Frederick Cook un controvertido explorador y médico estadounidense dijo haber encontrado gigantes durante su expedición “Bélgica” en 1986 y 1897 entre la tribu Ona, originarios de la Patagonia.
Las evidencias que ofreció fueron algunas fotografías y notas sobre sus experiencias en esa parte del mundo, de acuerdo a ellas, tribus con un promedio de 1,80 y 2,30 metros de altura realmente existieron.
Concedió una entrevista a la revista Popular Photography en 1938 y en sus comentarios afirmó la presencia de estos seres enormes, con pieles de animales, resistencia de caballo, fuerza de un toro y que vivían en tiendas humildes hechas de ramas de árboles.
Los Onas o la Nación Selknam, eran un pueblo amerindio que vivieron en el norte y centro de la isla Grande de Tierra del Fuego (entre Argentina y Chile) hasta inicios del siglo XX.
Originalmente eran nómadas terrestres, cazadores y recolectores, pero cuando los conquistadores llegaron a estas tierras fueron prácticamente expulsados y masacrados.
Usaban las pieles de animales como atuendos, llevaban arcos con flechas y vivían en cabañas de palo; en aquel entonces eran considerados como una de las tribus más primitivas en América.
El propio Charles Darwin habló fuertemente sobre ellos y describió a estos pueblos como “Hombres salvajes”, “Caníbales” y a su forma de vida como el “más miserable estado de
Kap Dwa el gigante de dos cabezas y casi 4 metros de altura era pariente cercano de ellos, al ser parte de los Patagones o los tehuelches.
Estoy convencido de que los onas y los aush provenían de los tehuelches del Sur de Patagonia, pero los aush llegaron a la Tierra del Fuego mucho antes que los onas. – El último confín de la Tierra de Lucas Bridges (1948).
Las leyendas sobre estos gigantes no faltaron y surgieron aún más debido a la imposibilidad de muchos exploradores o navegantes de acceder a ese sitio de la Tierra.
Algunos relatos hablan sobre gigantes salvajes pellirrojos que eran caníbales pero es importante recordar que la visión de los exploradores era muy diferente, en promedio ellos medían 1,60 o 1,70 metros de altura por lo que obviamente ver hombres mucho más altos los iba a sorprender.
El Dr. Frederick Cook compartió sus interesantes anotaciones con el mundo, las cuales servirían como evidencia para probar la existencia de gigantes en el siglo pasado.