El origen de la leyenda urbana contada por la banda Sangre. Digna de una película de terror.
Hasta el momento no se sabe exactamente de dónde o cómo nació esta leyenda. Algunas fuentes dicen que fue entre 1993 y 1998 cuando esta misteriosa historia surgió. Otros tantos afirman que es mucho más antigua (1980). Pero todas concuerdan que los “Hell Angels” en California iniciaban a sus miembros de esta manera.
Esta historia comienza con la banda Sangre, un grupo delictivo de los Estados Unidos que tienen un ritual de iniciación para los que quieran volverse un “Hell Angel”, un miembro de su pandilla, el consiste en conducir un auto por carreteras solitarias en mitad de la noche con las luces apagadas.
Hasta el momento todo bien, pero en cuanto un coche viaja en sentido contrario y hace el cambio de luces para avisarle que tiene las luces apagadas… es cuando el infierno se desata.
En ese momento el auto de la banda Sangre empieza la persecución del otro automóvil, todo culmina cuando el aspirante alcanza a su presa y asesin4 al conductor.
Algunos aseguran que el crimen no se comete en la carretera, si no en la casa de la víctima, pero al final es un desenlace trágico, sangriento y desafortunado.
Una vez que el aspirante cumple su cometido entrará de forma permanente en la banda.
¿Qué es la banda Sangre?
El nombre de la banda en ingles Bloods surgió en la década de 197 y tiene como sede Los Ángeles, sus miembros se dedican al tráfic0 de drog4s, el rob0 y asesinat0, entre otras actividades ilegales. En 1980 obtuvieron mayor renombre con la venta de crack y se llegaron a expandir a zonas como Nueva York.
A principios del siglo XXI ya había más de 20 mil afiliados a la banda en los Estados Unidos. Sus miembros son predominantemente afroamericanos y visten de rojo. Además tienen una reconocida rivalidad con los Crips, una banda que viste de azul.
Los miembros de la banda Sangre se identifican entre ellos con signos en las manos y marcas físicas como la llamada “pata de perro” o una triple Os, que consiste en tres círculos hechos con el cañón caliente de una p1stola.
¿Mentira o realidad?
Hasta el momento no se ha dado a conocer ninguna noticia que acredite a esta historia como algo real. En diarios de México y los Estados Unidos, países donde la leyenda ha tenido más difusión, se han dado a conocer supuestos documentos oficiales que alertan a la población sobre tener cuidado con los coches que viajan con las luces apagadas.
El veredicto es que se trata de una simple leyenda urbana y que además es difícil rastrear su origen preciso.
“Periodistas, autoridades, expertos en el submundo de las bandas callejeras y folcloristas han investigado la historia y determinado que no tiene nada que ver con hechos criminales reales en los últimos años”, afirma el libro Encyclopedia of Urban Legends, de Jan Harold Brunvand.